Todas las empresas que proveen en España productos o servicios a cualquier administración pública están obligadas a emitir su facturas en formato digital. Aunque ha sido un camino lento y tortuoso para algunas, lo cierto es que, además de la obligatoriedad, las empresas deberían tener en cuenta las numerosas ventajas relativas al ahorro que les va a proporcionar.
Costes de facturación
La emisión electrónica de facturas permite un ahorro estimado del 67% frente a la factura tradicional. Se reducen los costes en la manipulación de papel, el recuerdo de los pagos, la gestión de la tesorería, el archivo de los documentos, etc.
En cuanto a la recepción electrónica de facturas, supone que los costes estimados para su introducción en los sistemas internos, validación y macheo, gestión de pago, archivo, etc., se reduzcan drásticamente, permitiendo un ahorro del 65% de los costes.
Costes de gestión
La emisión de facturas tiene un coste por unidad de 4,45 euros cuando se realiza en papel y de 1,64 euros cuando se utiliza el formato electrónico. La diferencia es aún mayor cuando se trata de la recepción de facturas, que pasa de los 7,22 euros en papel a solo 2,27 euros en formato electrónico.
Costes de almacenamiento
Abandonar el papel y comenzar a facturar electrónicamente supone liberar un gran espacio llegando a alcanzar unos ahorros del 81%.
Tiempo
La facturación electrónica acorta los tiempos de entrega de las facturas y reduce todo el proceso de pago entre empresas o entre individuos y empresa. En emisión, se calcula que el tiempo manual dedicado a la creación, impresión, manipulación y ensobrado, envío y archivo por factura en papel es de 1 minuto y 33 segundos, mientras que con la factura electrónica el tiempo invertido en el proceso pasa a ser de 30 segundos.
En recepción, con la factura en papel son necesarios unos 9 minutos para la recepción, manipulación del correo, verificación y revisión de la factura, registro de datos en el sistema y archivo manual, mientras que sólo 2 minutos y 30 segundos son los que se necesitan para el mismo proceso de una factura electrónica.
Eliminación de tareas rutinarias
Por cada 20 facturas emitidas se ahorra más de media hora de trabajo mientras que en recepción se ahorran unas 3 horas. Esto permite a las empresas reducir tareas improductivas y enfocarse en labores que generen mayor eficiencia.
Medioambiente
¿Sabes la cantidad de madera que se necesita para cada millón de facturas en papel? Exactamente diez mil kilogramos. Empleando el formato electrónico se evita la talla de 56 árboles por cada millón de facturas y se reducen las emisiones de CO2.